domingo, 31 de janeiro de 2010

Parecer da Procuradoria Geral da República (PGR) sobre ADPF 153/Anistia

É importante que se debata o Parecer da PGR sobre a procedência da ADPF
153 promovida pelo Conselho Federal da OAB. É um material importantissimo
para discutir com o nosso alunado e a urgência de mudança do perfil do
ensino jurídico. O regime de 88 completa, na verdade, 25 anos de seu
início com a "transição lenta e gradual" inciada pelo General Presidente
Geisel na época de Golbery (1974) e concluída, formalmente, por um
processo negociado por Tancredo Neves em 1985. O parecer tornado público
hoje é, na verdade, desastroso, um retrocesso para a democratização da
sociedade brasileira. Demonstra a imperiosidade da busca urgente de novos
fundamentos na formação jurídica brasileira. É inexplicável que a PGR atue
de forma pontual avançada incorporando o que é de mais crítico da
Antropologia Social na defesa das sociedades indigenas, por exemplo, no
caso Raposa Serra do Sol e adote uma postura a mais retrógada possível
tanto no caso da Extradição/Refúgio do Battisti e agora ao se pronunciar a
respeito da ADPF 153. Argumenta-se:
1. Mais de um terço do parecer está voltado para a questão da natureza e
da admissibilidade da ADPF 153. Atua o parecer de modo a retirar a atenção
de questões de fundo para um mero formalismo. Não se preocupa, aliás, em
nenhum momento dar um sentido mais finalistico ao alcance da Lei n°
9.882/99 na defesa da Constituição e dos Direitos Fundamentais;
2. Cita J. Elster mas esquece de mencionar a sua obra estratégica para
compreender a ADPF 153 - Justiça Transicional! O Parecer em exame
desconhece, totalmente, o debate a respeito dessa temática;
3. Principalmente na parte mais formalista e depois em certos pontos de
conteúdo fia-se sempre na AGU como detentora mais certa da interpretação
das consequências da Lei da Anistia;
3. Transforma Sepulveda Pertence em verdadeiro "oráculo de Delfos" para
dar sentido ao contexto histórico a partir do movimento iniciado por
Terezinha Zerbini em 1975. Cita, a título de exemplo, uma fala do novo
"oráculos de Delfos" que a Lei da Anistia cobriria a parte penal mas
deixaria em aberto a responsabilidade civil do Estado. Dando a entender,
assim, que a discussão estaria resolvida mais no campo cível;
4. Além de dedicar um terço de discussão formalista sobre a ADPF, grande
parte do Parecer em exame é uma rala reconstituição histórica do
encaminhamento político e legislativo da Lei da Anistia. Em nenhum
momento, levanta-se a questão da legitimidade dos agentes públicos
responsáveis por crimes de lesa humanidade. Aliás, aqueles que sofrerão a
dureza e a brutalidade da repressão ilegitima são reduzidos como meros
"opositores políticos". Aliás, há uma passagem citada no Parecer da PGR ao
mencionar palavras de Franco Montoro que o problema da anistia é esquecer
de saber quem atirou a primeira pedra;
5. O Parecer da PGR não compreende em nenhum momento se quer o verdadeiro
alcance da bandeira da anistia ampla, geral e irrestrita. Procura, na
verdade, distorcer o seu sentido. Em hipotese nenhuma, ao contrário do que
expôe mencionado Parecer, objetivava-se alcançar os repressores de 64. A
idéia da amplituda da anistia era porque regime militar almejava apenas
limita-la aos "crimes" como de liberdade de expressão, etc. Fala-se do
Governo Figueiredo mas não é impositivo o Parecer em condenar o último
general presidente na forma como conduziu e impôs a anistia;
6. O mais preocupante para a formação jurídica brasileira em pleno século
XXI é que a PGR desconhece, totalmente,o sistema interamericano de DH,
tratados de direitos humanos, não enfrenta a questão da
imprescritibilidade da tortura, não aborda a vedação pela Corte
Interamericana de DH da autoanistia (o caso dos Barrios Altos no Peru).
Em sintese, a PGR, nesse início da segunda década do século XXI, abre uma
senda perigosa no tocante a defesa dos Direitos Humanos no Brasil. O
parecer ora lido demonstra os limites profundos de uma visão mais ampla e
densa de Direitos Humanos em nossa sociedade. Torna mais claro porque há
no Estado e na sociedade brasileiras resistência ao PNDH -3. O parecer
aponta para uma discussão, reiterando, formalista de ADPH e envereda-se
por uma sustentação política superficial e equivocada a respeito da Lei da
Anistia. É incapaz, assim, o parecer na sua parte material enfrentar de
forma densa e elucidativa para a sociedade brasileira o tema de Direitos
Humanos Ribas

sábado, 30 de janeiro de 2010

Garzón e Guantanamo

ELPAIS.com Edición impresa España Garzón investigará Guantánamo al no constar causas abiertas en EE UU
Se declara competente, en aplicación de los tratados, porque hubo un detenido español - Afirma que la reforma de la justicia universal no afecta al caso
MANUEL ALTOZANO - Madrid - 30/01/2010


El Gobierno de EE UU no ha contestado a Baltasar Garzón en siete meses sobre si existe alguna investigación abierta en ese país sobre "las supuestas torturas, malos tratos, tratos inhumanos y degradantes" sufridos por cuatro detenidos en la prisión ilegal de Guantánamo. Y como al juez de la Audiencia Nacional no le consta que se haya abierto un caso sobre estos delitos en ese país, ha decidido seguir adelante con su investigación. El magistrado se ha declarado competente para instruir sendas querellas presentadas por la Asociación Pro Dignidad de Presos y Presas de España y por la Asociación Libre de Abogados, Izquierda Unida y la Asociación pro Derechos Humanos de España por crímenes de guerra y genocidio contra los responsables de la prisión.

El juez recuerda que tres de las víctimas fueron procesadas en España
Garzón declara la competencia de los tribunales españoles a pesar de la reforma de la justicia universal aprobada por el Gobierno el 3 de noviembre, ya que uno de los prisioneros que fue víctima de esos presuntos delitos, Ahmed Abderraman Hamed, es ciudadano español. Respecto a los otros tres perjudicados, el marroquí residente en España Lahcen Ikasrrien, el palestino Jamiel Abdulatif Al Banna y el libio Omar Deghayes, el magistrado asegura que tienen "un vínculo de conexión relevante con España", como exige la nueva redacción de la ley, ya que fueron procesados por el propio Garzón "por delitos cometidos en España o relacionados con una investigación española".

El juez recuerda además los tratados de derechos humanos suscritos por España y que convierten a los tribunales españoles "en este momento" en los únicos competentes. "Lo contrario sería (...) optar por la impunidad", mantiene el magistrado, que recuerda que las nuevas disposiciones legales que restringen la justicia universal "siempre estarían subordinadas a lo que se establezca en esos tratados". También se refiere a cómo el Supremo absolvió a Abderraman denunciando las irregularidades de su detención -"sin cargos y sin garantías y, por tanto, sin control y sin límite"- en la base de Estados Unidos en Cuba.

Pero es que, además, según la interpretación que el magistrado da a la nueva regulación, los nuevos requisitos introducidos por el Gobierno para que un juez se declare competente en asuntos de jurisdicción universal -que el delincuente se encuentre en España, que existan víctimas de nacionalidad española o que conste algún vínculo de conexión relevante con España- no afectan a la fase de investigación de los delitos, sino a su "enjuiciamiento" posterior por el tribunal. Es decir, que esos requisitos deben ser valorados en el momento del juicio y no por el juez instructor, que sí puede seguir investigando.

La fiscalía de la Audiencia Nacional ha conseguido el archivo de varios casos de justicia universal aplicando esta nueva regulación, como el que se seguía contra el Gobierno chino por el genocidio del Tíbet. El juez Eloy Velasco rechazó investigar la expulsión de Aminetu Haidar por la nueva normativa a pesar de que encontró indicios de un delito de lesa humanidad.

Museu Memoria e a culpa

Sábado, 30/1/2010


ELPAIS.
El 'problema alemán' en Chile
En el Museo de la Memoria inaugurado en Santiago de Chile están todos: las víctimas del pinochetismo y también sus verdugos y los que aplaudieron o miraron a otro lado. Sobre esto ya escribió Karl Jaspers
RICARD VINYES 30/01/2010



En 1993, cuando el United States Holocaust Memorial Museum abrió sus puertas, el escritor y Nobel de la Paz Eliazer Wiesel afirmó que aquel museo era "una institución sobre la responsabilidad, la responsabilidad moral y la responsabilidad política". Desde luego, Wiesel no se refería a la responsabilidad de los culpables concretos del desastre, sino a la responsabilidad de la ciudadanía frente al desastre que aniquila convivencias. O dicho de otro modo, a las consecuencias que tiene la ausencia de responsabilidad política en los ciudadanos, algo que el filósofo alemán Karl Jaspers estableció en 1946 en un inquietante y demoledor texto titulado El problema de la culpa.


Nadie está ausente. El problema es que quieren verse distintos a como fueron, a como son
Desde aquella fecha se han erigido numerosas instituciones con ese objetivo, en África y Asia, en América y Europa, con mayor o menor envergadura y con modelos de gestión variados, pero el arranque ha sido siempre el mismo: la responsabilidad, y hasta el momento ésa es la definición de funciones y propósitos más exacta para ese tipo de instalaciones, se llamen museo, memorial, centro, espacio o cualquiera de las expresiones que se elija para interpelar las consecuencias generales de los grandes desastres éticos provocados por nuestras sociedades. El último episodio de estas instituciones universales -de las que por cierto España carece- es la inauguración en Chile, el pasado 11 de enero, del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.

Ubicado en un área cultural emergente de Santiago -el eje de Matucana- y frente a un relevante espacio de ocio y paseo de su centro urbano -el bello y frondoso parque de Quinta Normal-, la presidenta Michelle Bachelet y su equipo asesor en la materia han establecido con el Museo de la Memoria una marca en el territorio urbano que instituye la evocación permanente de la peor tragedia contemporánea de la nación.

Sin embargo, la realización del Museo no ha generado, ni a lo largo de su construcción ni en su inauguración, ningún tipo de debate, tan sólo dos actitudes: recriminación u hostigamiento. Cada una de naturaleza y origen muy distintos.

La actitud recriminatoria ha procedido de las numerosas agrupaciones y organizaciones vinculadas a las peticiones de reparación, a la conservación del patrimonio memorial, al desarrollo de la justicia sobre golpistas y torturadores y al restablecimiento de lo verdaderamente ocurrido con detenidos y desaparecidos. Son colectivos que han constituido y constituyen una parte muy importante del tejido democrático chileno. Su reparo al Museo procedía del sorprendente hermetismo que estableció el Gobierno desde que fue proyectada la institución hasta su inauguración, y esa forma de proceder generó desapego y desdén.

La paradoja es que si bien agrupaciones y colectivos nunca habían planteado en sus reclamos una institución de esa naturaleza, la realización del Museo, una de esas instituciones universales "sobre la responsabilidad política y la responsabilidad moral", es el resultado del cambio cultural producido por la actividad de esas agrupaciones a lo largo de los años. Fue en un paisaje de incomunicación donde se generaron desapego y fricción; sin embargo, la impresionante presencia de visitantes en el Museo, la satisfacción que denotan, el orgullo legítimo que he visto expresar por la existencia misma del edificio, por su belleza y significado, puede facilitar un cambio en las relaciones. Eso dependerá tanto de la gestión del Museo como de la comprensión de la nueva situación por parte de colectivos y agrupaciones. Es una gran ocasión que el cambio de gobierno producido en Chile puede desperdiciar, pero que tal vez ayude a muchos a sentir el Museo como un logro propio.

La segunda actitud hacia el Museo de la Memoria, la actitud de hostigamiento, tiene otra naturaleza. No se trata de un desencuentro como en el caso anterior, sino de una reacción violenta destinada a preservar la dignidad del pinochetismo social y sus alrededores.

El argumentario de ese hostigamiento es bien simple: tras aceptar con una retórica perezosa la bondad de un Museo de la Memoria, desautoriza en términos absolutos la opción de limitar su exposición permanente a los años de dictadura, ya que de ese modo se omiten las causas que a su entender llevaron (dicen unos), justificaron (dicen otros) el golpe de Estado de 1973. Hay víctimas que no aparecen en el Museo, no están todos, faltan los que sufrieron el régimen del presidente Allende, aquellos que no tuvieron más remedio que preparar el golpe, o aplaudirlo, aunque después, cuentan, quedaron sumidos en la pesadumbre por la imagen de su país ensangrentado.

Hay, claro, variables y complementos: Luis Larraín en el extremo negacionista; Roberto Ampuero, la versión equitativa, o Gonzalo Rojas, obsesionado aún en mantener el arquetipo del Mal subversivo. Ésa es la doctrina que a lo largo de casi cuatro años se ha lanzado contra el Museo: un Museo para mentir, un Museo para sesgar, un Museo para dividir.

Pero lo más contundente, y lo más claro, se halla en el editorial que El Mercurio publicó el 13 de enero con el título Memoria respetable, pero parcial. Se trata de un editorial golpista (he pensado bien ese término antes de utilizarlo) en versión humanizada: golpe de Estado, sí; violación de derechos humanos, no. O sea, dictadura sí (sólo cuando es necesaria), violencia no. Es en esta distinción en la que se basa la búsqueda de respetabilidad del pinochetismo social. Y el problema -y éxito- del Museo es que torpedea la línea de flotación de esa retórica.

Parece, pues, que el fondo del asunto es que sólo "aparecen" en el Museo los torturados, los detenidos-desaparecidos, los ejecutados por la dictadura, todo aquello que recogieron las Comisiones Rettig y Valech. Es unilateral: no aparecen todos. Ése es el problema. Sin embargo, eso no es cierto. En realidad todos aparecen en el Museo.

Quienes argumentan que sólo aparece una parte de la sociedad chilena no se dan cuenta -o quizá no quieren darse cuenta- de que esos ciudadanos destruidos por la dictadura no son una historia, o un relato, y aún menos una parte de la sociedad, sino que en realidad incluyen toda la historia, todo el relato contemporáneo que está en debate, y toda la sociedad, puesto que el daño sufrido incluye a los perpetradores directos, y también a los que aplaudieron pero no actuaron, a los que miraron hacia otro lado, a los compungidos y a los horrorizados, es decir, a toda forma de conducta, a toda moral.

Ésa fue la advertencia de Jaspers cuando nos aleccionó sobre el problema de la culpa en la sociedad alemana del Tercer Reich. De las cuatro culpas que estableció -criminal, política, moral y metafísica-, es la última la que nos muestra en qué modo lo sucedido a uno incluye la responsabilidad de otros; en sus propias palabras, "hay una solidaridad entre hombres como tales que hace a cada uno responsable de todo el agravio y de toda la injusticia del mundo, especialmente de los crímenes que suceden en su presencia o con su conocimiento. Si no hago lo que puedo para impedirlos soy también culpable".

Que nadie tema pues estar ausente en el Museo de la Memoria: los restos de Lonquén, de Calama, Pisagua, el retrato de los desaparecidos... todo eso incluye la presencia de quienes lo hicieron posible, de Luis Larraín, por ejemplo, o de El Mercurio sin duda. Todos están presentes, están ahí sin exclusión, está su obra, su legado. Aunque sospecho que es la forma espectral de su presencia lo que disgusta, porque avergüenza. Pasar de la condición de salvapatrias a la de culpable resulta éticamente insoportable, ése es el tema. Lo que conocemos como problema alemán, es decir, cómo fue posible que una sociedad culta y capaz de notables éxitos en todos los campos pensara y generase aquella destrucción sistemática, tiene su versión latinoamericana en Chile, y al fin y al cabo el Museo de la Memoria plantea esa pregunta exponiendo lo mismo que expone el Museo Memorial del Holocausto en Estados Unidos, o el de Berlín, o el de París en el Marais.

Nadie está ausente, el problema es que no quieren verse. O que quieren verse distintos a como fueron, a como son.


Ricard Vinyes es profesor de Historia Contemporánea en la Universidad de Barcelona.

segunda-feira, 25 de janeiro de 2010

A presença do Brasil no exterior

Folha de São Paulo, segunda-feira, 25 de janeiro de 2010



Ação é a maior no exterior no pós-2ª Guerra


Embora analistas e diplomatas ressaltem o caráter multilateral e regional da Minustah -países latino-americanos contribuem com metade do efetivo-, para os militares brasileiros o comando da força adquiriu importância particular.
Na sexta, com a distribuição de ajuda em Porto Príncipe, eles tentaram mostrar que continuavam no controle, apesar da presença americana.
Matias Spektor, da FGV do Rio, lembra que essa é a maior mobilização de tropas brasileiras desde a Segunda Guerra. Antonio Jorge Ramalho, da UnB, defende que similaridades entre as realidades brasileira e haitiana tornaram o contato dos militares com a população local melhor do que o que ela teve com outras forças estrangeiras.
Em estudo sobre a Minustah, Monica Hirst, professora de relações internacionais da Universidade di Tella (Buenos Aires), destaca a visão brasileira do Haiti como local de treinamento para ações não convencionais, "num contexto de novas ameaças e modalidades de conflito e de crescentes desafios humanitários".
O objetivo de ampliar a presença em forças de paz foi incorporado à Estratégia Nacional de Defesa (2008). A diplomacia, do seu lado, cita a articulação regional entre as principais motivações para assumir o comando da missão, em 2004. Na semana passada, o chanceler Celso Amorim defendeu a necessidade de que o reforço pós-terremoto viesse majoritariamente de países latino-americanos.
Embora a candidatura a uma cadeira permanente no Conselho de Segurança seja pano de fundo para as ações internacionais do Brasil, o vínculo com o Haiti não é imediato. "O momento da reforma [do CS] não está próximo e nada garante que esse gesto será lembrado quando chegar o momento", diz Ramalho.
Spektor e Hirst destacam, entre os dividendos que o Brasil pode colher da operação no Haiti, o aprimoramento de mecanismos de cooperação internacional civil, sejam diretos ou por meio operações triangulares, em que outros países repassam dinheiro a agências e ONGs nacionais.

O que são as forças de paz

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País expõe contradições de forças de paz
Nações em desenvolvimento fornecem capacetes azuis, mas objetivos são definidos pelo Conselho de Segurança da ONU

Brasil apresenta operação em termos de liderança na região e de solidariedade Sul-Sul, mas o mandato da missão na prática é limitado

CLAUDIA ANTUNES
DA SUCURSAL DO RIO

A presença do Brasil no Haiti se enquadra no movimento de redefinição da segurança coletiva no pós-Guerra Fria, com a multiplicação de operações da ONU para enfrentar conflitos internos e emergências humanitárias em países pobres e dados como "falidos".
As missões são aprovadas pelo Conselho de Segurança (CS), onde as cinco potências reconhecidas no período histórico anterior (EUA, Rússia, China, França e Reino Unido) têm maior peso na definição de seus objetivos. Mas 90% das forças para as 17 operações atuais vêm de países em desenvolvimento.
No caso do Brasil, essa contradição é ressaltada pelo fato de o governo definir a atuação no Haiti em termos de liderança regional, da intensificação da cooperação Sul-Sul e do pretendido papel de mediador entre países ricos e pobres.
Mas a Minustah, a força de paz, não tem preponderância na articulação com o governo haitiano dos projetos de reconstrução. Seu mandato é prover segurança, embora a "interconexão" com o desenvolvimento socioeconômico esteja contemplada nas resoluções do CS.
Frequentemente, quem dita as regras sobre o destino da ajuda ao desenvolvimento do Haiti são os maiores doadores, incluindo EUA, França, Canadá e os bancos multilaterais. No sábado, o chanceler Celso Amorim sugeriu que o Brasil lidere o esforço de reconstrução do país, num "plano Lula", mesmo que não seja o principal provedor de fundos.
"O mandato da missão, reduzindo o componente militar e ampliando a cooperação para o desenvolvimento, já tinha que ter sido redefinido", diz Antonio Jorge Ramalho da Rocha, professor da UnB que implantou o Centro de Estudos Brasileiros em Porto Príncipe.
Ele ecoa reivindicação que vem do início de 2008, quando a Minustah avaliou que a violência na capital haitiana estava controlada.

"Não indiferença"
Em artigo, Maria Regina Soares de Lima, do Observatório Político Sul-Americano, analisa a expansão das atribuições do CS, impulsionada pelo fim da bipolaridade EUA-URSS. Nos primeiros 40 anos da ONU, foram aprovadas 13 operações de paz. As demais 50 vieram no período posterior a 1988.
Os EUA, envolvidos nas próprias guerras, financiam, mas contribuem hoje com 75 pessoas no total das operações. Para emergentes como Brasil e Índia, no entanto, integrá-las passou a ser parâmetro de influência no sistema de segurança coletiva, por sua vez interligada ao debate inconclusivo sobre a ampliação do CS.
Matias Spektor, coordenador do Centro de Estudos sobre Relações Internacionais da FGV-Rio, lembra que críticos viram na proliferação das operações a intenção de criar "neoprotetorados", mas o tema é complexo.
Primeiro, partiu das potências ocidentais a defesa das "intervenções humanitárias". O conceito evoluiu para a "responsabilidade de proteger". Por razão óbvia de assimetria de poder, os demais países resistem à relativização do princípio da não intervenção. Mas, após o genocídio de 1994 em Ruanda, os africanos acabaram forjando o "princípio da não indiferença".
Ele já foi citado pelo governo Lula para justificar tanto a presença no Haiti como a mediação da crise institucional na Bolívia, em 2008, e a cooperação com países pobres em áreas como agricultura e remédios.
"O Brasil tem como mostrar que há maneiras de promover a governança em países falidos ou que passaram por tragédias sem seguir a lógica do neocolonialismo", afirma Spektor.
Ele ressalta, porém, continuidades na política externa. A intervenção para evitar golpe no Paraguai e a adoção da cláusula democrática do Mercosul, no governo FHC, foram passos, diz, da mudança "lenta" de "uma posição apenas soberanista para outra mais flexível".
Embora seja a primeira vez que comanda uma força de paz, o Brasil participa dessas operações desde os anos 1950, quando mandou tropas ao Oriente Médio após o ataque franco-britânico-israelense ao Egito, que havia nacionalizado o canal de Suez.
A maior contribuição brasileira até agora fora para as missões em Angola, ao fim da guerra civil. O Brasil quis liderar a força enviada a Timor Leste após a independência, em 1999, mas foi atropelado por restrição orçamentária depois da crise asiática.
A maioria dessas operações foi de "manutenção da paz", e não de "imposição da ordem", como foram, por exemplo, as na Somália em 1992 e no Haiti no final de 2003.

FSM e Boaventura de Sousa Santos

Folha de São Paulo 25 de janeiro de 2010
O grande balanço
BOAVENTURA DE SOUSA SANTOS


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Nos últimos tempos, surgiram dúvidas sobre o real impacto do Fórum Social Mundial e sobre a sua sustentabilidade futura
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REÚNEM-SE em Porto Alegre milhares de ativistas e líderes de movimentos sociais e ONGs para fazer o balanço dos dez anos do Fórum Social Mundial, um processo que nasceu no Brasil no início da década que seria também a da afirmação internacional do país. Nos últimos tempos, surgiram dúvidas sobre o real impacto do FSM e sobre a sua sustentabilidade futura.
O impacto do movimento do FSM foi muito superior ao que se imagina.
A ascensão ao poder dos presidentes progressistas da América Latina não se pode entender sem o fermento de consciência continental por parte dos movimentos sociais gerado no FSM ou potenciado por ele.
O bispo Fernando Lugo, hoje presidente do Paraguai, veio ao primeiro FSM de ônibus. A luta travada com êxito contra a Alca e os tratados de livre-comércio foi gerada no FSM.
Foi no primeiro FSM que se discutiu a importância de os países de desenvolvimento intermédio e com grandes populações -como Brasil, Índia, África do Sul- se unirem como condição para que as regras do jogo do capitalismo mundial fossem alteradas. Um dos participantes nas discussões viria a ser logo depois um dos articuladores da política externa brasileira. E os Brics e o G20 aí estão.
O FSM teve uma importância decisiva em denunciar a hipocrisia e a injustiça da ortodoxia financeira e econômica do Banco Mundial, do FMI e da OMC, abrindo espaço político para comportamentos heterodoxos de que se beneficiaram sobretudo os países ditos emergentes. Foi também sob a pressão das organizações do FSM especializadas na dívida externa dos países empobrecidos que o Banco Mundial veio a aceitar a possibilidade de perdão dessas dívidas.
O FSM deu visibilidade às lutas dos povos indígenas e fortaleceu-lhes a dimensão continental e global das suas estratégias. Deu igualmente visibilidade às lutas das castas inferiores da Índia (os dalits), particularmente a partir do FSM realizado em Mumbai.
Acima de tudo, o FSM deu credibilidade à ideia de que a democracia pode ser apropriada pelas classes populares e que os seus movimentos e organizações são tão legítimos quanto os partidos na luta pelo aprofundamento da democracia. A resposta à dúvida sobre a sustentabilidade do FSM deve centrar-se num balanço do futuro. Primeiro, o FSM tem de mundializar-se. O FSM da última década foi sobretudo latino-americano. Foi nesse continente que a ideia do FSM cativou verdadeiramente a imaginação dos movimentos sociais e se transformou numa fonte autônoma de energia contra a opressão. Essa fertilização do inconformismo teve repercussões nos processos políticos que tiveram lugar em muitos países do continente.
Está a emergir uma consciência continental que, embora difusa, tem como ideias centrais a recusa militante da concepção imperial da América Latina como quintal dos EUA e a reivindicação de formas de cooperação econômica e política que se pautam por princípios de solidariedade e reciprocidade, alternativos aos que subjazem aos tratados de livre-comércio.
Para ser sustentável, o FSM tem de fazer um esforço enorme no sentido de densificar a sua presença nos outros continentes.
Segundo, o FSM vai ter de produzir pensamento solidamente crítico e propositivo. O FSM não será sustentável se a sua voz, mesmo que plural, não se ouvir sobre os problemas que afligem o mundo. Não se compreende que o FSM, enquanto tal, não tenha tido voz (ou um conjunto de vozes estruturadas) sobre a reforma da ONU, sobre a mudança climática ou sobre a guerra infinita contra o terrorismo.
Terceiro, o FSM vai ter de apoiar ações coletivas e novas internacionais. O capitalismo tem uma capacidade enorme de regeneração. Os mais furiosos adeptos do neoliberalismo nem sequer pestanejaram para aceitar a mão do Estado na resolução da crise, o que por vezes envolveu nacionalizações, a palavra maldita dos últimos 30 anos. Por isso, o ativismo global do FSM vai aprofundar as suas agendas tendo em mente esse realismo, na base do qual podem construir novas lutas pela justiça social.
Têm vindo a surgir várias propostas no sentido de tornar o movimento da globalização alternativa mais afirmativo e vinculativo em termos de iniciativas mundiais. É o caso da proposta recentemente feita pelo vice-presidente da Bolívia de criar a Internacional dos Movimentos Sociais ou da proposta do presidente da Venezuela de criar a Quinta Internacional, congregando os partidos de esquerda em nível mundial. A primeira proposta é inspirada no FSM, e a segunda, talvez numa crítica ao FSM. Para ambas o fórum é relevante.



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BOAVENTURA DE SOUSA SANTOS, 69, sociólogo português, é professor catedrático da Faculdade de Economia da Universidade de Coimbra (Portugal). É autor, entre outros livros, de "Para uma Revolução Democrática da Justiça" (Cortez, 2007).

Operação Condor e o Ministério Público Federal

Folha de São Paulo, segunda-feira, 25 de janeiro de 2010




Ministério Público investiga dois desaparecimentos na fronteira
DA ENVIADA A URUGUAIANA (RS)

Com base em uma ação da Justiça italiana que responsabiliza militares sul-americanos pelo desaparecimento de militantes de esquerda de origem italiana durante as ditaduras militares, o Ministério Público Federal investiga o sumiço de duas pessoas em Uruguaiana.
No único inquérito aberto no país para apurar criminalmente ações do regime militar, o procurador da República da cidade, Ivan Cláudio Marx, solicitou à Polícia Federal a investigação do desaparecimento do ítalo-argentino Lorenzo Ismael Viñas e do padre argentino Jorge Oscar Adur.
Os dois sumiram no mesmo dia, em ônibus diferentes, quando cruzavam a fronteira entre Paso de Los Libres (Argentina) e Uruguaiana.
Os crimes ocorreram por conta da Operação Condor. O caso de Viñas, por ser de origem italiana, faz parte do processo do país europeu. A Justiça da Itália indiciou 13 militares brasileiros. Em 2007, o país pediu ajuda ao Brasil para que os acusados ainda vivos fossem julgados. Entre eles, responsáveis à época pelo SNI (Serviço Nacional de Informações) e um ex-secretário de Segurança do Rio Grande do Sul.
Tanto o caso de Viñas quanto o de Adur foram reconhecidos pelo governo brasileiro, que pagou indenização às famílias.

Operação Condor

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São Paulo, segunda-feira, 25 de janeiro de 2010


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Escavações revelam detalhes da repressão na Operação Condor
Antiga fazenda na fronteira com a Argentina foi um centro de detenção clandestino para opositores de ditaduras nos anos 70

Local passou a ser usado em 1976 para que suspeitos de atuar em grupos de esquerda pudessem ser interrogados, torturados e executados

ANA FLOR
ENVIADA ESPECIAL A URUGUAIANA (RS)

Novas escavações em uma fazenda na fronteira entre Brasil e Argentina trouxeram à tona detalhes das atividades da repressão no fim dos anos 70 na chamada Operação Condor -ação das ditaduras militares dos países da América do Sul.
A Estância La Polaca, a 15 km de Paso de Los Libres (Argentina) e às margens do rio Uruguai, foi um centro de detenção clandestino para onde eram levados opositores das ditaduras. Em dezembro, a Justiça argentina determinou nova busca de corpos no local. Acredita-se que lá possam estar enterrados militantes de esquerda.
Antiga fazenda de gado, La Polaca é um local sem moradores. Sua existência como centro de detenção foi confirmada em 2005, pelo depoimento de um ex-agente de inteligência do Exército argentino, Carlos Waern. O local começou a ser usado em 1976. Para lá eram levadas pessoas suspeitas de pertencer a grupos de resistência que passavam por Uruguaiana -fronteira binacional- para ir a Brasil, Argentina e Uruguai.
Segundo a pesquisadora Sabrina Steinke, da PUC-RS, de 1976 a 1978 várias fazendas foram tomadas por empréstimo na Argentina. Serviam de prisão onde os detidos eram interrogados, torturados e executados. "A prisão clandestina de estrangeiros na Argentina mostra que esses centros não serviam apenas ao governo argentino, mas sua manutenção estava relacionada à Condor."
La Polaca surgiu na contraofensiva da ditadura argentina para deter montoneros, grupo de origem peronista que tentou fazer um levante contra o regime no país no final dos anos 70. Ao menos dois deles foram detidos pela Argentina em Uruguaiana -procedimento ilegal que a Condor tornou rotineiro.
A partir de 1978, a Argentina passou a usar os presos, depois de torturados, como "marcadores". Tornavam-se informantes da repressão e, levados à ponte onde fica a fronteira de Libres e Uruguaiana, delatavam companheiros da esquerda que tentavam cruzar de ônibus.
Lorenzo Ismael Viñas e Jorge Oscar Adur, detidos em Uruguaiana em 26 de junho de 1980, teriam sido identificados por marcadores. O desaparecimento dos dois em solo brasileiro, reconhecido pelo Brasil, é investigado pela Procuradoria da República de Uruguaiana, que pretende denunciar os responsáveis criminalmente.
Segundo depoimentos, Adur teria passado por La Polaca.

Copa
La Polaca e os outros centros podem ter sido usados para esconder do mundo a repressão no país durante a Copa de 1978. Com o campeonato, foi necessário tirar presos ou sessões de interrogação de Buenos Aires.
Em documento obtido pelo Movimento de Justiça e Direitos Humanos de Porto Alegre, a polícia argentina pede ajuda ao Brasil para "localizar e deter montoneros" que eram uma ameaça para a "tranquilidade" da Copa do Mundo. "A busca dessas pessoas, consideradas inimigas do governo, era feita em conjunto e sistematicamente", afirma Jair Krischke, presidente do movimento.

domingo, 24 de janeiro de 2010

"Davos deveria decretar sua falência intelectual", diz idealizador do Fórum Social Mundial

Empresário brasileiro Oded Grajew, um dos mentores do Fórum Social Mundial, conta como a iniciativa surgiu há dez anos e avalia a repercussão dessa rede de movimentos sociais sobre a política internacional desde então.

Deutsche Welle: Dez anos após a realização do primeiro Fórum Social Mundial (FSM), em 2001, como o senhor – um dos mentores desse espaço de reflexão e reivindicação paralelo à política institucional e a estruturas governamentais – avaliaria o impacto da iniciativa desde então? Haveria conquistas que o senhor atribuiria inequivocamente à influência do FSM?

Oded Grajew: Em 2000, a ideologia neoliberal estava no auge, a ponto de muitos cientistas sociais considerarem que havíamos chegado ao fim da história. O mercado, liberado de qualquer controle social, iria levar a humanidade à prosperidade e à justiça social. Carlos Menem (o presidente argentino que levou seu país à bancarrota) era recebido com honras em Davos e sua política considerada como modelo para países emergentes.

O Fórum Social Mundial surgiu para denunciar os riscos do modelo liberal e abrir um espaço onde pessoas, lideranças e organizações da sociedade civil, de forma auto-organizada, pudessem se encontrar e, seguindo os parâmetros de nossa carta de princípios, se articular para visibilizar experiências e propostas, se articular e se juntar para ações conjuntas.

A partir da realização do primeiro Fórum Social Mundial em 2001, em Porto Alegre, centenas de fóruns locais, nacionais, continentais e temáticos se espalharam pelo mundo. O lema do FSM – "Um outro mundo é possível" – ganhou corações e mentes. De 2001 para cá, o mapa político de vários países mudou completamente, a começar pela América Latina, onde começou o FSM. Muitos frequentadores do FSM desde o seu início são hoje presidentes dos seus países ou ocupam postos importantes de governo.

A delegação norte-americana sempre foi muito grande nos eventos do FSM e vários dos seus componentes tiveram papel decisivo na eleição de Obama. As grandes manifestações mundiais contra a guerra do Iraque foram todas articuladas em Porto Alegre e fizeram a Alemanha e a França desistir de participar daquela guerra. A unanimidade pelo modelo neoliberal ruiu completamente e os países que ainda continuaram a seguir essa ideologia foram aqueles que mais sofreram com a crise financeira de 2008.

Inúmeras redes sociais a nível nacional, continental e mundial se estabeleceram (por exemplo, a rede mundial pela água como bem público), conseguindo importantes avanços nos seus propósitos. Praticamente todas as pressões exercidas nos encontros do Banco Mundial, FMI, G8 e, mais recentemente, em Copenhague, foram articuladas a partir de lideranças e entidades ativas participantes do FSM.

Essas pressões tiveram, por exemplo, a capacidade de barrar o projeto neoliberal da Área de Livre Comércio das Américas (Alca). Enumerar a quantidade de ações geradas a partir do processo FSM esgotaria o espaço desta entrevista. Temos hoje uma sociedade civil global ativa e atuante em todos os assuntos relevantes e o FSM teve uma grande participação nessa construção.

Com o agravamento dos problemas climáticos e os efeitos da crise financeira mundial, algumas reivindicações do FSM se tornaram ainda mais atuais. Até que ponto as estruturas governamentais e internacionais vêm se tornando permeáveis a certas propostas do fórum nesse sentido?

Vários governantes atuais eram frequentadores de primeira hora do FSM. Foram eleitos quando a onda da mudança expressa pelo lema "Um outro mundo é possível" começou a se espalhar na sociedade e colocaram em prática várias idéias e propostas visibilizadas nos encontros do FSM. Vários destes países melhoraram a vida de sua população e não é por acaso que se saíram melhor de que outros na recente crise financeira.

A governança mundial exercida pelo G8 teve que ser ampliada para mais países. As Nações Unidas, sempre muito resistentes a se tornarem mais democráticas, perderam ao longo dos últimos anos uma boa parte de sua credibilidade. O tema ambiental, que sempre esteve muito presente no processo FSM, se tornou um assunto prioritário a nível mundial, mas infelizmente ainda muito longe de se traduzir em ações concretas.

E no caso específico do Brasil, como o senhor descreveria a relação entre a atuação do governo Lula e as estruturas não governamentais associadas ao FMS?


O presidente Lula esteve sempre presente nos encontros do FSM, mesmo antes de ser eleito. Ele incorporou ao seu governo diversas propostas gestadas no FSM e convidou várias lideranças sociais a fazer parte do seu governo. Várias (eu diria a maioria) das iniciativas do seu governo contaram com a simpatia de organizações sociais brasileiras, outras receberam críticas e outras ainda foram julgadas insuficientes.

Mas o fato mais importante é que foram instituídos vários espaços de participação em que sugestões, propostas e críticas puderam se expressar de forma democrática. O processo FSM no Brasil (como, aliás, em todo o mundo) conserva seu caráter não governamental e apartidário, sendo uma iniciativa exclusiva da sociedade civil.

O senhor foi um dos idealizadores do FSM. Qual foi exatamente a sua contribuição pessoal para a criação do fórum na época? O que possibilitou que a ideia fosse viabilizada em 2001?

Em janeiro de 2000, eu estava com a minha mulher, Mara, em Paris. Os meios de comunicação davam um grande destaque às idéias de Davos, dizendo que finalmente encontramos no modelo neoliberal o modelo ideal e que os críticos só sabiam criticar e não tinham nenhuma proposta alternativa. Eu lembrava também de uma conversa recente que havia tido com Klaus Schwab, presidente do Fórum Econômico Mundial, em que notei total insensibilidade com as questões sociais e ambientais. Isso tudo me incomodava enormemente.

Um dia, sentado no quarto do hotel esperando minha mulher se arrumar para sairmos e refletindo sobre o que poderia ser feito para reagir a essa situação, tive a ideia: criar um Fórum Social Mundial em contrapartida ao Fórum Econômico Mundial, a fim de denunciar o modelo neoliberal, mostrar que existem outros modelos alternativos e oferecer um espaço para a sociedade civil se encontrar, se articular e ganhar força para ações conjuntas. Percebi logo que essa ideia tinha sentido e força. Chamei minha mulher e pergunte a ela o que achava. Ela gostou. Resolvi começar a testar a idéia.

Meu amigo Chico Whitaker estava coincidentemente em Paris na mesma época com sua mulher, Estela. Liguei para ele e contei a idéia. Ele também gostou. Propus a ele irmos conversar com Bernard Cassen, do Le Monde Diplomatique, que era nosso conhecido, para continuar a checar a idéia. Fomos com nossas mulheres ao seu escritório. Bernard também gostou e começamos a especular sobre o local. Bernard deu a idéia de Porto Alegre pelo fato de essa cidade ter sido governada vários anos por governos progressistas, proporcionando assim uma chance maior de acolhimento da ideia.

Voltando ao Brasil, telefonei ao prefeito de Porto Alegre e ao governador de Rio Grande do Sul, que já eram meus conhecidos. Os dois gostaram da ideia e se propuseram a apoiá-la. Eu já tinha vários anos de militância na área social, embora minha origem fosse como empresário do setor de brinquedos.

Na época, inclusive, era presidente do Instituto Ethos, que promove a responsabilidade social empresarial. Reuni no meu escritório do Ethos sete amigos e dirigentes de organizações sociais brasileiras para compartilhar a ideia do FSM e todos gostaram. Formamos o grupo de oito organizações brasileiras encarregadas de colocar em pé o primeiro evento. Fomos a Porto Alegre para verificar a infraestrutura. Fui buscar recursos com duas fundações internacionais (tive inclusive de viajar para conseguir esses apoios), o que viabilizou a instalação de um escritório e uma secretaria executiva.

Começamos a articular com organizações sociais internacionais com as quais todos nós tínhamos relações e organizamos o lançamento internacional do FSM num encontro em Genebra, em junho de 2000. Em janeiro de 2001, com a participação de 20 mil pessoas e a realização de 800 atividades (no último FSM, na Amazônia, tivemos a presença de 150 mil pessoas e a realização de 2.500 atividades), foi realizado o primeiro encontro do FSM.

Em breve, o senhor estará em Porto Alegre para o 10º FSM. Ao longo de uma década, o fórum também mudou sua estrutura, tendendo a uma maior descentralização. Dado o caráter de atuação local de grande parte dos movimentos e organizações envolvidos no fórum, como constituir um discurso por assim dizer "global"? Ou isso é dispensável?

O lema do FSM é "Um outro mundo é possível". Desde o seu início, o Fórum Social é mundial e tem a perspectiva da construção de um processo de globalização diferente, que privilegie o desenvolvimento sustentável, os direitos humanos, a justiça social e a democracia participativa. Na metodologia do FSM, dentro da Carta de Princípios, sendo um processo auto-organizado, cada organização desenvolve suas atividades, se manifesta e se articula de forma totalmente livre e independente. Ninguém é mais importante que o outro, nenhum tema exclui a relevância de outros. A valorização da diversidade é um dos pilares dos nossos princípios.

Desta maneira, há um fluxo e ligação permanentes entre assuntos e atividades locais, nacionais, continentais e globais que acabam se realimentando e se fortalecendo mutuamente. Foi por isso que, após três edições do FSM em Porto Alegre, veio a decisão de ir para a Índia e posteriormente para outros países da América Latina, Ásia e África, realizar fóruns nacionais e continentais na Europa, nos Estados Unidos. Com isso, o fórum foi se espalhando em cidades e países de todo o mundo, se articulando em ações locais e globais que não se contrapõem, mas se conectam e se fortalecem mutuamente.

O lema do Fórum Econômico Mundial neste ano é "Melhorar o estado do mundo: repensar, reformular, reconstruir". No entanto, considerando as medidas de combate à crise deliberadas pelo G20 e a falta de um consenso internacional relevante na Cúpula do Clima em Copenhague, o que deveria ser repensado em Davos?

O Fórum Econômico Mundial foi criado e é financiado pelos defensores do modelo neoliberal. Está a serviço de uma ideologia que coloca o mercado liberado de controles e restrições como o grande alavancador do "progresso", que enxerga as restrições ambientais como danosas ao desenvolvimento. Tornou-se uma atividade bastante lucrativa para o seu organizador, e diante dos sucessivos fracassos de suas ideias (em 2000, elegeu Carlos Menem, que levou a Argentina à bancarrota, como seu herói e recomendou que suas políticas fossem um modelo para todos os países da região; menosprezou todas as informações sobre o aquecimento global; nunca se manifestou contra as guerras atuais; não conseguiu prever a recente crise financeira até pouco tempo antes de ela estourar etc etc etc) deveria simplesmente decretar sua falência intelectual e moral e encerrar suas atividades.

Tenta maquiar seus reais interesses, escolhendo títulos pomposos para seus encontros e promovendo atividades filantrópicas (coletando alguns dólares entre seus participantes e achando que com aquilo vai acabar com a pobreza no mundo), para tentar passar a ideia de que se preocupa com questões sociais e ambientais.

As empresas e os governos que chegaram ao poder graças ao financiamento que obtiveram dessas empresas, frequentadores e financiadores de Davos, protagonistas do fracasso de Copenhague, deveriam investir suas energias para fazer uma profunda autocrítica sobre suas responsabilidades na enorme pobreza e desigualdade social em nosso planeta, no acirramento de conflitos e guerras, no eminente desastre ambiental que se aproxima devido às suas políticas e modelo de produção e consumo que colocam em risco a nossa vida, certamente a dos nossos filhos e netos e de toda a espécie humana.

O lema da reunião de fechamento de Davos deveria ser: "mea culpa –onde e como foi que tanto erramos?"

Oded Grajew, 65 anos, empresário e idealizador do Fórum Social Mundial, integra o Movimento Nossa São Paulo e é membro do Conselho Deliberativo e presidente emérito do Instituto Ethos de Empresas e Responsabilidade Social.

Entrevista: Simone Lopes

Revisão: Alexandre Schossler


Fonte: http://www.dw-world.de/dw/article/0,,5136046,00.html

sábado, 23 de janeiro de 2010

O papel das ONGS

Folha de São Paulo, sábado, 23 de janeiro de 2010




Organizações são mal necessário, diz especialista
DE GENEBRA

David Lewis, professor de política social na London School of Economics, avalia que as ONGs estão em baixa, mas são um "mal necessário". Para ele, as entidades pecam por um excesso de desorganização que atrapalha sua eficácia, mas ao mesmo tempo são úteis ao complementar o trabalho do Estado com projetos mais ousados e diversificados.




FOLHA - Qual o problema de coordenação das ONGs?
DAVID LEWIS - Nada de novo. Acho que embora as pessoas que trabalham nas ONGs geralmente sejam movidas pelo altruísmo, as ONGs como instituição são individualistas e autocentradas. Elas competem por fundos quando não estão em campo, e por isso precisam mostrar que estão fazendo um determinado trabalho. Por outro lado, as ONGs têm estruturas e focos diferentes, e podem ousar mais meio que por serem mais amadoras. Dentro disso, a falta de coordenação pode se tornar importante para elas às vezes.

FOLHA - Como assim?
LEWIS - As pessoas costumam pensar "se estou dando US$ 10 a uma ONG, quero ver US$ 10 chegarem às pessoas em necessidade". Elas não querem saber que 20% vai para custos administrativos. Muita gente que doa para as ONGs é pouco realista, e há uma certa pressão para que elas não gastem dinheiro em administração. Muitas vezes as ONGs acabam sendo vítimas das expectativas.

FOLHA - Na lista de doadores no site da ONU, a fração de donativos às ONGs é bem menor que a entregue à ONU ou gerenciada pelos governos doadores. Há desconfiança?
LEWIS - Acho que as ONGs hoje não são mais tão populares. Nos anos 60 e 70, ninguém falava em ONG -claro, tinha algumas, mas elas não eram um ator importante nas ações humanitárias. Aí nos anos 80 foram "descobertas" e passaram a ser consideradas a solução de muitos problemas, pois era a época do neoliberalismo, de enxugar o Estado. Já no fim dos anos 90, elas começaram a sair de moda, em parte porque sua performance não atendia às expectativas, em parte porque os doadores passaram a apoiar mais ações governamentais novamente. Também acho que as pessoas passaram a se preocupar com a falta de prestação de contas. Hoje os sentimentos são contraditórios sobre as ONGs. Elas não são mais consideradas organizações honradas, mas mais como um "mal necessário" na falta de alternativas.

FOLHA - Como elas tentam superar essas limitações?
LEWIS - O que algumas têm feito é adotar um acordo sobre padrões. Hoje o mais conhecido é o Sphere, que estabelece padrões em termos de transparência, qualidade etc. Outra coisa é que emergiram novos tipos de ONG, como os Médicos Sem Fronteiras, mais pragmáticas. Eles vão lá e só querem prestar cuidados médicos, sem se meter em política.

FOLHA - Como escolher para quem doar? Há parâmetros?
LEWIS - Acho que o único parâmetro é que elas prestem contas. Como doador, você tem de pedir que elas abram seus balanços. Mesmo assim é difícil. Você vai procurar quem alimenta mais gente com US$ 100 por dia no Haiti ou vai olhar como as pessoas estarão um ano após o início da ação?

FOLHA - As pequenas ONGs estão atuantes no Haiti?
LEWIS - Há uma mistura. Há umas muito pequenas, semana passada teve um grupo de pessoas que embarcou para o Haiti para tirar gente de escombros. Pode não ser nem uma ONG formal. E na outra ponta há essas ONGs superprofissionais, que parecem corporações.

sexta-feira, 22 de janeiro de 2010

Imprensa alemã vê disputa colonialista na ajuda ao Haiti

Imprensa alemã vê disputa colonialista na ajuda ao Haiti

Para a imprensa alemã, Haiti se desenvolve como palco de disputa colonialista entre Brasil, EUA, França e Venezuela. Especialista alemão acredita, todavia, que expansão da missão da ONU definirá futuro dos haitianos.

Em artigo publicado nesta segunda-feira (18/01), a versão online do semanário alemãoDer Spiegel comentou que as consequências do terremoto no Haiti ainda não são previsíveis, "no entanto, EUA, França e Brasil já brigam pela hegemonia no país".

Segundo o site, especialistas preveem que nos próximos anos o país deverá se tornar novamente uma espécie de colônia, enquanto o governo haitiano observa a situação de forma impotente.

Hillary Clinton e presidente haitiano René PrévalHillary Clinton e presidente haitiano René PrévalApós o presidente haitiano René Préval haver transferido o controle do aeroporto de Porto Príncipe aos EUA, Brasil e França teriam se queixado oficialmente junto a Washington, já que as tropas norte-americanas passaram a ter preferência nas permissões de aterrissagem e os aviões de muitas organizações de ajuda humanitária tiveram que ser desviados para a República Dominicana. Para o ministro francês do Exterior, Bernard Kouchner, os EUA teriam "anexado" o aeroporto da capital haitiana, escreveu oSpiegel Online.

O site alemão comentou que o Brasil, que chefia a missão de paz da ONU na ilha caribenha, não estaria pensando em "desistir do controle sobre a ilha" e que, segundo o governo brasileiro, a reconstrução do Haiti deverá continuar sendo um projeto latino-americano.

Para o Spiegel Online, no entanto, diferentemente de 1994, quando os EUA marcharam no Haiti com 20 mil soldados e restituíram o então presidente deposto Jean Bertrand Aristide, desta vez, Barack Obama estaria se esforçando em evitar a impressão de uma ocupação. "Não temos a intenção de substituir a liderança haitiana", afirmou uma representante do Departamento de Estado norte-americano, citada pelo site alemão.

Brasileiros benquistos

Em outro artigo, publicado no Zeit Online na semana passada, o site lembrou que os EUA teriam um grande interesse estratégico no Haiti. A ilha se localiza somente a mil quilômetros de Miami e cerca de um milhão de haitianos vivem nos EUA.

Um colapso político e econômico total do Haiti poderia levar a uma violenta onda de refugiados, o que preocuparia o governo de Washington, que ainda luta contra as consequências da crise financeira.

Além disso, afirmou o Zeit Online, o Haiti se desenvolveu como ponto de conexão para o tráfico de drogas, sendo também uma importante peça na disputa regional de influência na América Latina. Opositores dos EUA já teriam enviado um sinal: o primeiro avião que pousou em Porto Príncipe após a catástrofe veio da Venezuela, lembra a página de internet do semanário Die Zeit, referindo-se a Hugo Chávez.

Para o Zeit Online, enquanto a França, antiga força colonial no Haiti, exerceria somente um papel cultural e simbólico, o Brasil ganhou boa reputação entre os haitianos como líder da Minustah (Missão das Nações Unidas para a Estabilização do Haiti). Sob a liderança brasileira, os capacetes azuis da ONU teriam conseguido conter bandos criminosos em bairros pobres, escreve o site.

Soldados norte-americanos levam suprimentos a vítimas do terremotoSoldados norte-americanos levam suprimentos a vítimas do terremoto












Expansão da Minustah

Para o professor Günther Maihold, vice-diretor do Instituto Alemão de Política Internacional e de Segurança (SWP), de Berlim, os problemas de coordenação da ajuda humanitária no local devem-se à falta de um governo capaz de agir. Segundo ele, isso estaria sendo usado pela mídia para levantar eventuais disputas hegemônicas.

O fato de se estar lidando agora com um país destruído é algo inusitado que levaria a situações novas para a comunidade internacional, opina Maihold. Ele acredita que os EUA estariam bem orientados pela ONU para evitar o que o presidente venezuelano, Hugo Chavez, chamou de "militarização do Caribe".

Maihold reiterou a importância da ajuda à população haitiana para os norte-americanos, como forma de evitar uma onda migratória para a Flórida. Para o especialista do SWP, a expansão da missão de paz da ONU definirá o futuro do Haiti.

Com 1.166 soldados na ilha, o Brasil lidera desde 2004 a missão de paz da ONU no Haiti. Segundo o setor de Comunicação Social do Exército brasileiro, esse número foi estabelecido em acordo entre o governo do Brasil, do Haiti e as Nações Unidas.

Autor: Carlos Albuquerque

Revisão: Roselaine Wandscheer

terça-feira, 19 de janeiro de 2010

Haiti e a democracia

Folha de São Paulo, terça-feira, 19 de janeiro de 2010




O Brasil deve defender a democracia no Haiti
MARK WEISBROT


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Os EUA, ao lado de Canadá e a França, conspiraram abertamente durante quatro anos para derrubar o governo eleito do Haiti
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MUITO TEMPO antes do terremoto, a situação do Haiti já era comparável à de muitos sem-teto nas ruas de grandes cidades dos EUA: pobres demais e negros demais para ter os mesmos direitos concretos que outros cidadãos.
Em 2002, quando um golpe militar que teve o apoio dos EUA afastou temporariamente o governo eleito da Venezuela, a maioria dos governos no hemisfério reagiu rapidamente e ajudou a forçar o retorno do governo democrático. Mas, dois anos mais tarde, quando o presidente haitiano democraticamente eleito, Jean-Bertrand Aristide, foi sequestrado pelos Estados Unidos e levado de avião para o exílio na África, a reação foi fraca.
Diferentemente dos dois séculos de saque e pilhagem do Haiti desde sua fundação graças a uma revolta de escravos em 1804, da ocupação brutal por fuzileiros navais dos EUA entre 1915 e 1934 e das incontáveis atrocidades cometidas sob ditaduras auxiliadas e apoiadas por Washington, o golpe de 2004 não pode ser relegado ao esquecimento, visto como nada mais que "história antiga". Aconteceu há apenas seis anos e é diretamente relacionado ao esforço de ajuda e reconstrução que o presidente Obama está propondo agora.
Os Estados Unidos, ao lado de Canadá e a França, conspiraram abertamente durante quatro anos para derrubar o governo eleito do Haiti, cortando quase toda a ajuda internacional ao país com o objetivo de destruir sua economia e torná-lo ingovernável. Eles conseguiram.
Para aqueles que se indagam por que não existem instituições governamentais haitianas para ajudar com os esforços de socorro e ajuda às vítimas do terremoto, essa é uma das grandes razões. Ou o porquê de haver 3 milhões de pessoas amontoadas na área atingida pelo terremoto.
A política dos EUA ao longo dos anos também ajudou a destruir a agricultura haitiana, por exemplo, ao forçar a importação de arroz americano subsidiado e eliminar milhares de plantadores de arroz haitianos.
O primeiro governo democrático de Aristide foi derrubado após apenas sete meses, em 1991, por oficiais militares e esquadrões da morte que, mais tarde, se descobriu estarem a soldo da Agência Central de Inteligência dos EUA. Agora Aristide quer retornar a seu país, algo que a maioria dos haitianos reivindica desde sua derrubada.
Mas os EUA não o querem ali. E o governo Preval, que é completamente dependente de Washington, decidiu que o partido de Aristide -o maior do Haiti- não será autorizado a concorrer nas próximas eleições (previstas originalmente para fevereiro).
O medo que Washington tem da democracia no Haiti talvez explique o porquê de os Estados Unidos agora estarem enviando 10 mil soldados e priorizando a "segurança", em lugar das necessidades de vida ou morte dos milhares de pessoas que precisam de atendimento médico urgente.
Na manhã de domingo, o mundialmente renomado grupo humanitário Médicos Sem Fronteiras queixou-se que um avião transportando sua unidade hospitalar móvel foi obrigado pelos militares americanos a mudar de rota, passando primeiramente pela República Dominicana. Isso custaria 24 horas cruciais e um número desconhecido de vidas.
Essa ocupação militar por tropas dos EUA vai suscitar outras preocupações no hemisfério, dependendo de quanto tempo elas permanecerem -assim modo como a ampliação recente da presença militar dos Estados Unidos na Colômbia vem sendo recebida com insatisfação e desconfiança consideráveis.
Organizações não governamentais vêm levantando outras questões sobre a reconstrução proposta: compreensivelmente, querem que a dívida remanescente do Haiti seja cancelada e que sejam feitas doações ao país, e não empréstimos (o FMI propôs um empréstimo de US$ 100 milhões). As necessidades da reconstrução chegarão a bilhões de dólares.
Será que Washington vai incentivar o estabelecimento de um governo que funcione? Ou vai impedi-lo, canalizando a assistência por meio de ONGs e assumindo ele próprio várias outras funções, devido a sua oposição de longa data à autonomia do Haiti?
O Brasil não segue a linha de Washington na América do Sul nem, mais recentemente, o fez em Honduras, "quintal" dos Estados Unidos -onde o governo brasileiro defendeu em vão a restauração da democracia após o golpe de 28 de junho, e a administração Obama, não.
Por que não defender a democracia também para o Haiti, mesmo que Washington seja contra?



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MARK WEISBROT, doutor em economia pela Universidade de Michigan, é codiretor do Centro de Pesquisas Econômicas e Políticas, em Washington ( www.cepr.net ). Tradução de Clara Allain .

domingo, 17 de janeiro de 2010

Edgar Morin - Metamorfose

Metamorse El Pais 17 de janeiro de 2010
Cuando un sistema es incapaz de resolver sus problemas vitales por sí mismo, se degrada, se desintegra, a no ser que esté en condiciones de originar un metasistema capaz de hacerlo y, entonces, se metamorfosea. El sistema Tierra es incapaz de organizarse para tratar sus problemas vitales: el peligro nuclear, agravado por la diseminación y, tal vez, privatización del arma atómica; la degradación de la biosfera; una economía mundial carente de verdadera regulación; el retorno de las hambrunas; los conflictos étnico-político-religiosos que tienden a degenerar en guerras de civilización... La ampliación y aceleración de todos esos procesos pueden considerarse el desencadenante de un formidable feed-back negativo, capaz de desintegrar irremediablemente un sistema.

Una conciencia de que la Tierra es la patria común no es contraria al vigor de las colectividades locales
Lo probable es la desintegración. Lo improbable, aunque posible, la metamorfosis. ¿Qué es una metamorfosis? El reino animal aporta ejemplos. La oruga que se encierra en una crisálida comienza así un proceso de autodestrucción y autorreconstrucción al mismo tiempo, adopta la organización y la forma de la mariposa, distinta a la de la oruga, pero sigue siendo ella misma. El nacimiento de la vida puede concebirse como la metamorfosis de una organización físico-química que, alcanzado un punto de saturación, crea una metaorganización viviente, la cual, aun con los mismos constituyentes físico-químicos, produce cualidades nuevas.

La formación de las sociedades históricas, en Oriente Medio, India, China, México o Perú, constituye una metamorfosis a partir de un conglomerado de sociedades arcaicas de cazadores-recolectores que produjo las ciudades, el Estado, las clases sociales, la especialización del trabajo, las religiones, la arquitectura, las artes, la literatura, la filosofía... Y también cosas mucho peores, como la guerra y la esclavitud.

A partir del siglo XXI, se plantea el problema de la metamorfosis de las sociedades históricas en una sociedad-mundo de un tipo nuevo, que englobaría a los Estados-nación sin suprimirlos. Pues la continuación de la historia, es decir, de las guerras, por unos Estados con armas de destrucción masiva conduce a la cuasi-destrucción de la humanidad.

La idea de metamorfosis, más rica que la de revolución, contiene la radicalidad transformadora de ésta, pero vinculada a la conservación (de la vida o de la herencia de las culturas). ¿Cómo cambiar de vía para ir hacia la metamorfosis? Aunque parece posible corregir ciertos males, es imposible frenar la oleada técnico-científico-económico-civilizatoria que conduce al planeta al desastre. Y sin embargo, la historia humana ha cambiado de vía a menudo. Todo comienza siempre con una innovación, un nuevo mensaje rupturista, marginal, modesto, a menudo invisible para sus contemporáneos. Así comenzaron las grandes religiones: budismo, cristianismo, islam. El capitalismo se desarrolló parasitando a las sociedades feudales para alzar el vuelo y desintegrarlas.

La ciencia moderna se formó a partir de algunas mentes rupturistas dispersas, como Galileo, Bacon o Descartes; luego, creó sus redes y sus asociaciones; en el siglo XIX, se introdujo en las universidades y, en el XX, en las economías de los Estados, para convertirse en uno de los cuatro poderosos motores del bajel espacial llamado Tierra. El socialismo nació en algunas mentes autodidactas y marginalizadas del siglo XIX, para convertirse en una formidable fuerza histórica en el XX. Hoy, hay que volver a pensarlo todo. Hay que comenzar de nuevo.

De hecho, todo ha recomenzado, pero sin que nos hayamos dado cuenta. Estamos en los comienzos, modestos, invisibles, marginales, dispersos. Pues ya existe, en todos los continentes, una efervescencia creativa, una multitud de iniciativas locales en el sentido de la regeneración económica, social, política, cognitiva, educativa, étnica, o de la reforma de vida.

Estas iniciativas no se conocen unas a otras; ninguna Administración las enumera, ningún partido se da por enterado. Pero son el vivero del futuro. Se trata de reconocerlas, de censarlas, de compararlas, de catalogarlas y de conjugarlas en una pluralidad de caminos reformadores. Son estas vías múltiples las que, al desarrollarse conjuntamente, se conjugarán para formar la vía nueva que podría conducirnos hacia la todavía invisible e inconcebible metamorfosis. Para elaborar las vías que confluirán en la Vía, tenemos que deshacernos de las alternativas reductoras a las que nos obliga el mundo de conocimiento y pensamiento hegemónico. Así es necesario, al mismo tiempo, mundializar y desmundializar, crecer y decrecer, desplegar y replegar.

La orientación mundialización-desmundialización significa que, si bien hay que multiplicar los procesos de comunicación y "planetarización" culturales, si bien necesitamos que se constituya una conciencia de "Tierra-patria", también hay que promover, de manera desmundializadora, la alimentación de proximidad, los artesanos de proximidad, los comercios de proximidad, las huertas periurbanas, las comunidades locales y regionales.

La orientación crecimiento-decrecimiento significa que hay que potenciar los servicios, las energías verdes, los transportes públicos, la economía plural -y por tanto la economía social y solidaria-, las disposiciones para la humanización de las megalópolis, las agriculturas y ganaderías biológicas, y reducir los excesos consumistas, la comida industrializada, la producción de objetos desechables y no reparables, el tráfico de automóviles y de camiones en beneficio del ferrocarril.

La orientación despliegue-repliegue significa que el objetivo ya no es fundamentalmente el desarrollo de los bienes materiales, la eficacia, la rentabilidad y lo calculable, sino el retorno de cada uno a sus necesidades interiores, el gran regreso a la vida interior y a la primacía de la comprensión del prójimo, el amor y la amistad.

Ya no basta con denunciar, hace falta enunciar. No basta con recordar la urgencia, hay que comenzar a definir las vías que conducen a la Vía. ¿Hay razones para la esperanza? Podemos formular cinco:

1. El surgimiento de lo improbable. La victoriosa resistencia, en dos ocasiones, de la pequeña Atenas frente al poderío persa era altamente improbable, pero permitió el nacimiento de la democracia y la filosofía. También fue inesperado el frenazo de la ofensiva alemana ante Moscú, en el otoño de 1941, e improbable la contraofensiva victoriosa de Zhúkov, iniciada el 5 de diciembre, que vendría seguida, el 8, por el ataque de Pearl Harbour y la entrada de Estados Unidos en la guerra.

2. Las virtudes generadoras-creadoras inherentes a la humanidad. Al igual que en todo organismo humano adulto existen células madre dotadas de aptitudes polivalentes (totipotentes) propias de las células embrionarias, pero desactivadas, en todo ser humano, y en toda sociedad humana, existen virtudes regeneradoras, generadoras y creadoras durmientes o inhibidas.

3. Las virtudes de la crisis. Al tiempo que las fuerzas regresivas o desintegradoras, las generadoras y creadoras despiertan en la crisis planetaria de la humanidad.

4. Las virtudes del peligro. "Allá donde crece el peligro, crece también lo que nos salva". La dicha suprema es inseparable del riesgo supremo.

5. La aspiración multimilenaria de la humanidad hacia la armonía (paraíso, luego utopías, después ideologías libertaria/socialista/comunista, más tarde aspiraciones y revueltas juveniles de los años sesenta). Esta aspiración renace en el hervidero de iniciativas múltiples y dispersas que podrán alimentar las vías reformadoras destinadas a confluir en la vía nueva.

Las viejas generaciones están desengañadas de tantas falsas esperanzas. A las jóvenes les entristece que no haya una causa común como la de nuestra resistencia durante la II Guerra Mundial. Pero nuestra causa llevaba en sí misma su contrario. Como decía Vassili Grossman de Estalingrado, la mayor victoria de la humanidad fue también su mayor derrota, puesto que el totalismo estalinista salió victorioso de ella. Hoy, la causa es inequívoca, sublime: se trata de salvar a la humanidad.

La verdadera esperanza sabe que no es certeza. Es una esperanza no en el mejor de los mundos, sino en un mundo mejor. "El origen está delante de nosotros", decía Heidegger. La metamorfosis sería, efectivamente, un nuevo origen.

Breve solidariedade

Texto do Caderno mais da Folha de São Paulo de 17/01/2010

Breve solidariedade

Comoção mundial provocada pelo terremoto no Haiti, na terça, não irá se transformar em programa político para tirar o país da miséria

JOSÉ ARTHUR GIANNOTTI
COLUNISTA DA FOLHA

Há comportamentos humanos que nos lavam a alma. Um dos mais belos é a solidariedade. Ficamos comovidos quando as pessoas se mobilizam para ajudar o próximo, ou melhor, fazer do outro um próximo, alguém com o qual compartilhamos nosso destino.
Quanto maior a tragédia, quase sempre maior é a reação solidária. O terremoto que destruiu o Haiti desde logo mobilizou todo mundo e ficamos orgulhosos de nossas tropas lá estacionadas. Esquecemo-nos de que a missão tem um cunho político e nos demoramos nos elogios de sua bravura.
O retrato de cada perda foi desenhado, cada soldado morto foi enaltecido e a grandeza dos trabalhos da Pastoral da Criança foi divulgada aos quatro ventos. Todos nos irmanamos num mesmo sentimento. Alguns escritores mais politizados lembraram as mazelas de uma nação que nasceu de uma revolta de escravos, mas que, talvez por isso mesmo, tenha sido neutralizada, coibida no seu desenvolvimento, para que não servisse de exemplo para a América Latina.
No Brasil escravocrata, muitos temeram que uma maioria de escravos pudesse, num golpe violento, se liberar de seus ferros. Mas no momento da grande catástrofe natural tudo isso se olvida. Vale a reafirmação de nossa humanidade, de nossa espiritualidade.
Não somos como as placas tectônicas que se chocam sem levar em conta os estragos na vida daqueles que vivem sobre elas. Não somos como os outros seres vivos que se entredevoram, com as raras exceções daquelas espécies que entram em simbiose ou daqueles animais que, pelo menos, caçam conjuntamente.
Abrimo-nos para estarmos juntos e nos abrimos para irmos além de nós mesmos, para a transcendência.

Vingança da natureza
A presença da morte nos une por laços que vão além daqueles já institucionalizados. Nem sempre essa presença nos articula, em geral tratamos de esquecê-la, como se não passasse de um acidente inesperado. Se o homem é aquele ser que fala e sabe que morre, também aprendeu a dizer sem falar e a morrer sem saber. A morte no hospital quase sempre não se transforma num incidente de uma biografia que haveria de durar para sempre?
Quando a natureza interrompe essas fronteiras pacificadoras -o terremoto, o tsunami, a erupção vulcânica e outros horrores-, é como se ela se vingasse. É como se o lado negro do espírito acuasse seu lado luminoso.
Nas guerras das estrelas, esse conflito não comparece como se desdobrasse duas forças, de tal modo transformadas pela técnica que se resolvem numa luta entre o espírito do mal contra o espírito do bem?
A noção de espírito anda meio desmoralizada entre os filósofos profissionais. É quase impossível depurá-la de seu ranço romântico, da exaltação a que foi submetida pelos idealistas alemães, como Hegel e Schelling. Este, no início do século 19, teve enorme sucesso pregando que a natureza, no fundo, seguia os caminhos traçados pelo espírito. Hegel o define como a ideia efetiva que se sabe para si mesma. Um saber que junta o teórico e o prático e que, por isso mesmo, pratica a verdade da natureza, mostra que essa natureza é apenas a passagem de uma verdade superior.

Crise ambiental
O terremoto de Lisboa, de 1755, foi sempre uma pedra no sapato desses otimistas. Igualmente, a crise ambiental em nosso século mostra os limites físicos muito palpáveis de um capital que se apresentou como espírito puro. Seja como for, há momentos na história em que as pessoas se tomam como cidadãos de um mundo do espírito, tecendo entre si fortes laços de solidariedade.
Essa trama admirável, porém, dura pouco, a não ser que se institucionalize como "Pastoral da Criança", "Comunidade Solidária" e tantos outros institutos. No entanto cabe perguntar: como uma instituição pode se manter solidária quando só pode subsistir enfrentando a rotina e os percalços da burocratização?
Às vezes se costuma afirmar que no maior perigo se encontra a salvação. Que não se faça desse enunciado uma fórmula, mas me parece que existe uma atividade humana que entremeia o maior perigo com a semente da salvação. Não é ela a política? Muito diferente, por certo, da atividade cotidiana do político, chata e repetitiva, que, particularmente no Brasil, dificilmente escapa da corrupção. Mas aquelas ações refundadoras do Estado, instauradoras do novo e que, por isso mesmo, escapam de qualquer análise científica.
Nunca me canso de citar o pensamento de Maquiavel afirmando que o estadista pode perder sua alma para salvar o Estado. Há momentos em que alguns homens abrem o espaço onde se tecem novas formas de sociabilidade.
O marquês de Pombal reconstruindo Lisboa. Robespierre levando o terror ao limite e, assim, criando um paradigma da destruição da própria política. Abraham Lincoln conferindo nova unidade aos EUA. Até que ponto o nosso Getúlio Vargas não criou igualmente um novo Estado brasileiro a despeito dos desastres do Estado Novo?
A política, no seu limite, é uma guerra das estrelas desdobrando-se nas fronteiras da Terra. O desastre do Haiti nos mostra a possibilidade de uma solidariedade capaz de capturar toda a população da América Latina.

Rotina de pobreza
Mas não vejo nela muitas forças capazes de transformar essa solidariedade numa política. Da mesma forma que estamos passando por uma grande crise sem aproveitar as chances de cortar certas raízes da desordem capitalista, tudo indica que, depois da tempestade, o Haiti voltará à sua rotina de miséria, como tantos outros povos do globo.
E os políticos muito seguros voltarão a se ocupar de suas almas -ou melhor, da alma de suas finanças. Tristes tempos.